Imagine un molusco con miles de ojos pequeños incrustados en su concha. Este es el caso de los quitones, un tipo de molusco marino único en su especie.
Tipos de ojos de los quitones
Los quitones poseen dos tipos de ojos. Algunos pueden tener miles de pequeños ojos insertados en su caparazón. Estos ojos tienen lentes hechas de un mineral conocido como aragonita. Otros quitones tienen lo que se conoce como ‘manchas oculares'. Estas funcionan como píxeles individuales, formando un sensor visual disperso en su caparazón.
Investigación sobre la visión de los quitones
Un estudio reciente aporta una nueva luz sobre la evolución de la visión de estos moluscos. Este estudio ha demostrado que los quitones desarrollaron ojos en cuatro ocasiones diferentes, creando dos sistemas visuales distintos hasta hoy.
La investigacion hizo uso de fosiles y ADN para reconstruir la historia evolutiva de los quitones. Resulta que los dos sistemas visuales evolucionaron dos veces cada uno y en rápida sucesión. Los grupos que obtuvieron estructuras visuales similares eran parientes distantes, separados por millones de años.
Evolución de la visión de los quitones
Las ‘manchas oculares' aparecieron en un grupo de quitones desde hace 260 a 200 millones de años durante el periodo Triásico. Este evento ocurrió ligeramente antes que los primeros ‘ojos de caparazón' que otro grupo desarrolló en la época Jurásica hace 200 a 150 millones de años.
Después, los ‘ojos de caparazón' surgieron por segunda vez durante el periodo Cretácico hace 150 a 100 millones de años. Esto ocurrió en los quitones Toniciinae y Acanthopleurinae, convirtiéndolos en los ojos con lentes más recientes que conocemos.
Finalmente, las ‘manchas oculares' evolucionaron nuevamente en un linaje diferente del árbol evolutivo de los quitones. Este evento sucedió tan recientemente como en el Paleógeno, hace 75 a 25 millones de años.
Ojos y placas de caparazón de los quitones
Los quitones poseen aberturas en las placas de su caparazón por donde pasan los nervios ópticos. Las especies con menos ranuras tienden a desarrollar menos ‘ojos de caparazón', pero más complejos. En cambio, los quitones con más ranuras tienden a desarrollar más ‘ojos de manchas', pero más simples.
Procesamiento de la información visual en los quitones
La manera en que estas estructuras transmiten información visual al cerebro del quitón es motivo de investigación actual. Se sabe que, al menos en una especie de quitón, los ‘ojos de caparazón' más complejos envían información visual a una estructura neural en forma de anillo que envuelve todo su cuerpo.