Un sorprendente episodio protagonizado por una serpiente venenosa en Australia, ha captado la atención tanto a nivel local como nacional.
El descubrimiento en el refrigerador
Gail Auricht es la mujer australiana que se encontró con una serpiente de unos 80 centímetros de largo, ocultándose en su refrigerador. La especie en cuestión es una de las comúnmente encontradas en la costa este de Australia, la serpiente negra de vientre rojo. El episodio se registró el 13 de enero cuando la serpiente estaba colgando del dispensador de hielo y agua del refrigerador de la señora Auricht.
El refugio contra el calor
Estos reptiles son conocidos por buscar agua o lugares frescos para huir del calor. Dadas las altas temperaturas en Australia durante los meses calurosos, no es raro encontrar serpientes cerca de las casas. Para lidiar con este inusual visitante, se requirió la intervención de un cazador de serpientes profesional, Simon Hempel.
Acción del cazador de serpientes
Hempel, cuya labor ha incrementado a causa del clima caliente después de la lluvia, destacó que esta es la primera vez que encuentra una serpiente en un dispensador de un refrigerador. Los cazadores de serpientes como él, son capaces de remover y reubicar de forma segura a estos reptiles.
Situación repetida en Australia
No se trató de un caso aislado, ya que, se registraron incidentes similares en Australia la misma semana. A pesar de ser venenosas, las serpientes negras de vientre rojo no son conocidas por ser agresivas. Sin embargo, su veneno puede causar síntomas desagradables, tales como sangrado, hinchazón, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, diarrea y debilidad muscular.
Recomendaciones de los expertos
Para evitar sorpresas desagradables, los expertos aconsejan mantener las puertas y ventanas cerradas, almacenar los alimentos y basura de forma adecuada y, en caso de encontrarse con una serpiente, llamar a un profesional.