El agua constituye la base de la existencia y el desarrollo humano, simbolizando justicia, equidad y cultura. Representa a nuestro planeta, pero está en declive. La criosfera, que es la parte de la superficie terrestre donde el agua se solidifica debido a temperaturas frías, ha disminuido aproximadamente 87.000 kilómetros cuadrados anualmente entre 1979 y 2016. Esta reducción señala una disminución en la disponibilidad de recursos hídricos, representando un reto global, especialmente para áreas costeras y regiones con estaciones secas.
El agua proveniente del deshielo de los glaciares es crucial para obtener agua potable, en la agricultura, la industria y la generación de energía limpia. Veolia, líder mundial en la gestión eficiente de recursos (agua, energía y residuos), impulsa la transformación ecológica mediante la innovación, ofreciendo soluciones para mitigar los efectos del cambio climático. En España, Veolia suministra agua a 13,5 millones de personas en más de 1.100 municipios, promoviendo la cooperación entre el sector público y privado.
El 22 de marzo ha sido designado por las Naciones Unidas como el Día Mundial del Agua, una fecha para concienciar sobre la importancia crítica del agua en nuestra sociedad. El Objetivo de Desarrollo Sostenible número 6 busca garantizar el acceso universal al agua y saneamiento para todos para el año 2030, destacando la urgencia de asumir responsabilidades para preservar los recursos hídricos del planeta.
El deshielo como tema central del Día Mundial del Agua 2025
Los efectos del deshielo están causando inundaciones, sequías, deslizamientos de tierra y la elevación del nivel del mar. Durante el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares, las Naciones Unidas han decidido enfocarse en la conservación glaciar para el Día Mundial del Agua, debido al incremento en la tasa de fusión de los glaciares con el aumento de la temperatura global, lo que hace que el ciclo del agua sea impredecible. La protección de las zonas glaciares se ha convertido en una estrategia esencial para la supervivencia de sus habitantes, los ecosistemas naturales y la biodiversidad.
Existe una conexión clara entre la velocidad de derretimiento de los grandes hielos y las emisiones de gases de efecto invernadero: incluso en un escenario optimista con bajas emisiones en un siglo, la masa glaciar se reduciría en un 25%. En el peor de los casos, este porcentaje podría ascender hasta el 54%.
La pérdida de masa glaciar ha contribuido de manera significativa al aumento del nivel del mar globalmente, presentando un riesgo no solo en áreas próximas a los glaciares sino también en regiones más alejadas, incluyendo España. Nuestro país es particularmente vulnerable al cambio climático, con eventos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes e intensos, como la DANA que devastó Valencia y otras áreas del Mediterráneo, y con el 75% de su territorio en riesgo de desertificación.
Desde 2011, los glaciares de los Pirineos han perdido 63 hectáreas de hielo y de los 24 glaciares existentes entonces, ahora solo quedan 15. Se anticipa que para mediados de este siglo, podría ocurrir la completa deglaciación de la Península. Los glaciares de Aneto y Monte Perdido son un ejemplo claro: con el aumento de las temperaturas, podrían desaparecer en 10 a 15 años.
Iniciativas científicas para la resiliencia territorial
La aplicación del conocimiento científico en el ámbito del agua y del medio ambiente es vital para la resiliencia territorial, algo que Veolia ha demostrado a través de Cetaqua, su Centro Tecnológico del Agua. Este centro se centra en asegurar la sostenibilidad y eficiencia del ciclo del agua mediante propuestas innovadoras de I+D+i.
En Chile, Cetaqua realizó un estudio que reveló que los glaciares de la zona central podrían perder un volumen significativo si no se reducen las emisiones contaminantes en los próximos cien años, afectando los niveles del río Maipo y la escasez hídrica en la región. El estudio resalta la importancia de fomentar la colaboración para realizar proyecciones, encontrar soluciones a largo plazo y anticipar los efectos del cambio climático.
ICARIA es otro proyecto esencial para la adaptación al cambio climático que propone un marco de modelización de infraestructuras críticas estratégicas, para aumentar la capacidad de resistencia frente a fenómenos meteorológicos extremos. Cofinanciado por el programa Horizon Europe de la Comisión Europea, ICARIA probará soluciones en diferentes casos de estudio, tanto en el Área Metropolitana de Barcelona y en el Archipiélago del Egeo Meridional (Grecia), áreas críticas del Mediterráneo que enfrentan impactos climáticos severos, como en Salzburgo (Austria), que experimenta olas de calor y deshielo glaciar.
Reaprovechamiento del agua para nuevos propósitos
Veolia ha emergido como un actor clave en el avance medioambiental, siendo un líder internacional en la gestión de recursos hídricos. Un ejemplo de su impacto en este ámbito es la ecofactoría BioSur de Granada. Gracias a una colaboración público-privada entre Veolia y el Ayuntamiento de Granada, y aplicando principios de economía circular, la ecofactoría ha logrado reducir la huella de carbono del sistema de gestión del agua local, optimizando el uso de recursos y generando energía renovable.
La ecofactoría del Baix Llobregat, gestionada por Aigües de Barcelona (parte del grupo Veolia), envía 1.500 litros de agua regenerada cada segundo al río Llobregat. Esta agua se capta subterráneamente en la planta de tratamiento de agua potable de Sant Joan Despí, donde se potabiliza y se distribuye, cerrando así el ciclo del agua. El agua regenerada se utiliza para fines agrícolas y urbanos, y en el futuro también podría emplearse para usos industriales. Actualmente, el 25% del agua utilizada en el área metropolitana de Barcelona proviene de esta agua regenerada.
Por otro lado, la planta depuradora Cabezo Beaza de Cartagena, que se utiliza exclusivamente para fines agrícolas, trata 24.000 m3 de agua diariamente, suficiente para irrigar 4.300 hectáreas de cultivos. Su sistema de reutilización del agua permite a los agricultores de la zona, una de las más afectadas por sequías, mantener niveles de producción incluso en condiciones de escasez extrema.
En las Islas Canarias, donde no hay ríos y las lluvias son escasas debido a la geografía del archipiélago, operan más de 50 estaciones depuradoras que producen más de 6.000.000 m3 de agua regenerada al año, utilizada para regar campos de golf y otras áreas verdes municipales.
Veolia y su compromiso con el cambio climático
En su plan estratégico, GreenUp 2024-2027, Veolia se enfoca en cuatro pilares para alcanzar sus objetivos: resiliencia, para proteger a las personas, los recursos y la biodiversidad; descarbonización, para aumentar la energía verde y mejorar la calidad de vida; circularidad, para combatir la contaminación y recuperar recursos; y desarrollo digital, para transformar la economía social y los servicios ambientales.
En el contexto actual, es crucial priorizar la sostenibilidad y la economía circular para enfrentar el reto del cambio climático, especialmente la escasez de agua. Veolia promueve infraestructuras verdes y resilientes a través de las ecofactorías, optimizando el ciclo completo del agua y regenerándola para usos urbanos, industriales y turísticos; transformando residuos en nuevos recursos (biogás, fertilizantes, etc.); produciendo energía renovable para el autoconsumo de las plantas depuradoras; y generando un impacto positivo en el entorno local. Así, la ecofactoría evoluciona de ser una simple depuradora a una fábrica de recursos destinados a preservar el medio ambiente y la biodiversidad local.
La innovación y la digitalización son también esenciales en la lucha contra el cambio climático y la transformación ecológica. Las tecnologías avanzadas, como la Inteligencia Artificial y el big data, son fundamentales para detectar incidencias y aumentar la resiliencia de las infraestructuras, lo que permite anticipar eventos extremos. Por ello, la red de centros Dinapsis Hubgrade by Veolia ofrece soluciones inteligentes para monitorizar de manera remota las actividades de la compañía y optimizar la gestión del agua y la salud ambiental de los territorios.
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