Un descubrimiento intrigante en el mundo fúngico podría cambiar nuestra comprensión de las relaciones ecológicas entre los hongos y las plantas.
Mycena adapta su papel ecológico
Un grupo de científicos ha dado con un hallazgo insospechado en el reino de los hongos. Al parecer, un género denominado Mycena está adoptando nuevas formas de relación ecológica. A través de análisis genéticos y químicos, el equipo puso bajo la lupa a 10 variedades de vegetales en busca de indicios de Mycena, a menudo denominados hongos de sombrero.
Clasificación tradicional de los hongos
Según la clasificación común, los hongos se agrupan en tres categorías ecológicas: son mutualistas, parásitos o saprófitos. Los Mycena entran en el tercer grupo, viven de los restos de materia orgánica muerta y en proceso de descomposición.
Un cambio en la evolución de Mycena
El estudio en cuestión ha encontrado indicios de que los Mycena estarían colonizando las raíces de plantas vivas, lo que apunta a que podrían estar evolucionando hacia nuevos roles ecológicos. Se identificaron rastros genéticos de Mycena en 9 de las 10 especies vegetales investigadas.
Posible vínculo con las plantaciones humanas
Este cambio evolutivo podría tener relación con las plantaciones gestionadas por el hombre, en las que se cultivan en línea especies arbóreas idénticas. En el espacio silvestre, los árboles adultos no evidenciaron presencia de Mycena, mientras que en una plantación los ejemplares jóvenes estaban fuertemente colonizados por estos hongos.
¿Una ayudante en la invasión?
Al parecer, algunos Mycena estarían asistiendo a las plantas que colonizan. Intercambian nitrógeno, nutriente vital para las plantas, por carbono de éstas. Esta observación pone de relieve la plasticidad ecológica de los hongos y sugiere que los Mycena podrían estar desarrollando características micorrizas, es decir, la capacidad de colonizar los tejidos radiculares de la planta anfitriona.
Hongos micorrizados: amigos o enemigos
Los hongos micorrizados pueden ser beneficiosos o perjudiciales, mutualistas o parásitos. Se piensa que los primeros hongos micorrizados tuvieron un papel relevante en la adaptación de las plantas a la vida en tierra hace alrededor de 400 millones de años. Aunque se requieren más investigaciones para confirmar esta teoría, es posible que las plantaciones monoculturales hayan proporcionado las condiciones idóneas para la adaptación de estos hongos.