La presentación del iPhone 6 y por tanto del chip A8 de Apple dejó a muchos con algunas dudas dudas, ya que finalmente no se produjo el salto a una CPU de cuatro núcleos y parecía que el SoC A8 no resultaba nada innovador frente al A7.
El caso es que nada más lejos de la realidad, ya que como hemos podido ver gracias a Anandtech el [pajarito]nuevo SoC de Apple[/pajarito] viene cargadito de novedades y representa un salto importante frente al A7, al menos más de lo que puede parecer a simple vista.
Así, el SoC A8 de Apple viene fabricado en proceso de 20nm y no de 28nm, como el SoC A7, lo que significa que ofrece una mayor eficiencia, un menor consumo y una menor temperatura de trabajo, con todo lo que ello conlleva.
Entrando a ver el rendimiento encontramos que según Apple el SoC A8 ofrece hasta un 25% más de potencia a nivel CPU que el SoC A7, algo que no podemos justificar en un aumento de frecuencia de trabajo, ya que el A8 corre sólo a 100 MHz más que el A7 y cuenta con dos núcleos, por lo que sólo nos queda pensar en una mejora de la arquitectura Cyclone que permite alcanzar ese nivel sin subir más la frecuencia de trabajo.
Saltamos a la GPU, donde nos encontramos una PowerVR Series6XT GX6650 equipada con seis núcleos gráficos, un cambio sustancial frente a la PowerVR G6430 con cuatro núcleos gráficos de iPhone 5s que, en teoría o sobre papel, sería hasta un 50% más rápida.
Finalmente hacemos una pequeña referencia a la memoria RAM. Apple ha decidido mantener 1 GB, algo que a simple vista puede parecer una mala decisión, pero lo cierto es que no necesita más.
Actualmente iOS es uno de los sistemas operativos móviles más optimizados del momento, junto con Windows Phone, y ambos pueden trabajar sin problemas en equipos con 512 MB de RAM de forma fluida, mientras que en algunos casos Android puede dar serios tirones incluso en equipos con 1 GB de RAM.
Es una realidad, la optimización reduce las necesidades de hardware y conduce a un mejor aprovechamiento del mismo, y en iOS encontramos un claro ejemplo de ello.