Un análisis de Green Electronics Council ha puesto de manifiesto que el nuevo Mac Pro es respetuoso con el medio ambiente, una conclusión que supone, en definitiva, que el nuevo equipo de Apple es un paso adelante frente a la generación anterior de cara al cuidado del planeta.
Sí, es evidente que dicha afirmación no quiere decir que estemos ante un producto totalmente verde, esto es, con un nivel cero de impacto medioambiental, pero sí que resulta altamente ecológico y eficiente.
Así, el nuevo Mac Pro consume un 68% menos que el modelo anterior, utiliza un 74% menos de aluminio y acero en su carcasa y tiene un 82% menos de volumen que su antecesor.
Todo lo dicho tiene consecuencias muy importantes que enlazan directa o indirectamente con lo expuesto.
Por ejemplo, el hecho de que consuma menos electricidad reduce la huella de carbono del sistema, mientras que la reducción del uso de aluminio y acero supone de forma indirecta una menor emisión de gases de efecto invernadero (durante el proceso productivo de ambos materiales ocurre la emisión de los mismos).
Finalmente su menor volumen desemboca en una mayor facilidad para el transporte, lo que de nuevo supone de forma indirecta una reducción de la emisión de gases de efecto invernadero (se trasportan más unidades en menos espacio y por tanto se consume menos combustible).
Gracias a lo expuesto el nuevo Mac Pro ha cumplido sobradamente los requisitos del programa ENERGY STAR 6.0, utilizado por la agencia americana de medio ambiente como reconocimiento a los productos que respectan el medio ambiente.